En los próximos años, las tecnologías que impulsan la cuarta revolución industrial transformarán fundamentalmente toda la estructura de la economía mundial, nuestras comunidades y nuestras identidades humanas.
Estamos viviendo cambios profundos en todas las industrias, marcados por el surgimiento de nuevos modelos de negocios, la disrupción de nuevas tecnologías que “buscan un problema que resolver” y el rediseño de los sistemas de producción, consumo, transporte y delivery.
Las compañías Industriales como las conocemos hoy, seguirán produciendo, pero todas tendrán software y analytics en el core de su negocio.
Como mencioné anteriormente en mi artículo Transformación Digital en un Mundo que Envejece Aceleradamente, a diferencia de las revoluciones industriales anteriores, la tecnología y su adopción han avanzado en forma exponencial y no de manera gradual, por lo mismo los ciclos de vida de nuevos productos y servicios se han ido acortando considerablemente.
Cambios en los modelos de negocios
Al igual que hemos visto en la industria del software, con el cambio de un modelo de licenciamiento de software a Software como Servicio (SAAS: Software as a Service), en donde se ha pasado de comprar un determinado programa computacional a “arrendar su uso”, tiene cada vez más sentido que los productos de empresas industriales se comiencen a vender más cómo “Productos como servicio” o “Soluciones como servicio”, más que como un producto en sí mismo.
¿Qué beneficios puede traer esto?
Para los clientes, la posibilidad de acceder a los beneficios de un determinado producto “on-demand” pasando de tener un costo fijo a un costo variable, pudiendo re-destinar recursos financieros valiosos desde el punto de vista financiero, pero no sólo eso, sino también el obtener una solución, un producto inteligente que por ejemplo proactivamente reconoce la necesidad de una mantención o posibles fallas.
Para las compañías, desde el punto de vista financiero, menores barreras de entrada, ya que los ingresos se distribuyen en todo el periodo del servicio y no sólo en el momento de la compra y desde el punto de vista de la entrega de los servicios, clientes con mayor valor en el tiempo. Las compañías de telecomunicaciones han sabido explotar esto muy bien ¿no?. Equipos de telefonía móvil de alta gama se subvencionan para su adquisición a un bajo costo de entrada y una mayor tarifa en el tiempo.
¿Cómo diferenciarse y ganar a la competencia que puede producir a costos más bajos?
Sin duda en este modelo gana el mejor servicio.
Y es en esto donde se vuelve fundamental no sólo tener las mejores máquinas, sino de aprovechar el software, explotar los datos que se pueden capturar de su operación y hacer que las máquinas y los colaboradores humanos sean más inteligentes y eficientes para otorgar un mejor servicio y diferenciarse.
La capacidad de responder más rápido a los clientes, reducir los tiempos de comercialización y una adaptación más rápida a la demanda.
Se hace fundamental el enfoque en el cliente y la personalización de los servicios para no sólo aumentar la oferta de servicios sino también ofrecer
servicios mucho más customizados.
Diseñar soluciones integrales en todo el proceso de entrega, desde la investigación y desarrollo hasta la postventa.
Aprovechar el software para crear interfaces API (Application Programming Interface), que comparta los datos del servicio con proveedores y clientes para trabajar en colaboración en procesos más eficientes y reducir costos y tiempo. Esto aumenta las barreras de entrada a la competencia ya que nuestro producto/servicio pasa a formar parte de la cadena de valor de nuestros clientes.
Y finalmente, pasar sólo de la automatización a la inteligencia. Aprovechar todas las tecnologías como robótica, más IOT (Internet de las cosas) y la Inteligencia Artificial para producir a menores costos que la competencia.