¿Qué es el Internet de las cosas?
La llegada de internet a la sociedad y en especial a la sociedad de consumo, no sólo se convirtió en un elemento de avance tecnológico, sino que poco a poco ha ido ganando más espacio para convertirse en un elemento prácticamente indispensable en el quehacer cotidiano.
Muchas personas en la actualidad tienen, de alguna u otra forma, un acercamiento a internet. Este podría establecerse a través de la conexión directa de cualquier aparato con conectividad (PC, Tablet o teléfonos inteligentes) o mediante el acceso a otros tipos de equipos cuyo funcionamiento requiere conectividad a internet.
En su definición más simple, internet es percibido como una “red informática mundial que utiliza redes de acceso público para transmitir información”. En un sentido más amplio, es considerada como una “red de redes”, capaz de desarrollar una mejor conectividad o incluso, nuevos modelos de negocio.
El Internet de las Cosas – IOT
En los últimos años se ha abierto un debate tanto en medios de comunicación especializados como entre expertos sobre el denominado “Internet de las Cosas” o sus siglas derivadas del inglés “Internet of Things” (IOT) . En una oportunidad, la revista Forbes, definió esta situación como un “concepto que no sólo tiene el potencial de impactar cómo vivimos, sino también la manera de trabajar”.
Para entender en primer lugar qué es el internet de las cosas y más específicamente el impacto que tiene sobre las personas lo principal es conocer cada elemento de la frase de una manera separada.
Si bien Internet puede definirse como ese elemento que permite la interconectividad entre los seres humanos, también se debe tomar en consideración los objetos físicos que suelen ser de uso cotidiano y que cuentan con sensores, u otro tipo de elementos que permiten conectarse a Internet, dicho de otra manera, estos son los denominados equipos inteligentes.
El Internet de banda ancha se encuentra cada vez más disponible y su precio está disminuyendo, haciéndolo accesible de forma masiva. Paralelamente, cada vez son más los equipos que se están fabricando con capacidad para conectarse a Internet. Adicionalmente a todo ello, los costos de esta tecnología se hacen cada vez más accesibles, que aunado a la penetración de los dispositivos inteligentes genera el ambiente perfecto para el “Internet de las cosas”.
En resumen, el Internet de las cosas es el concepto de conectar básicamente cualquier equipo con un interruptor de encendido y apagado, a Internet. En particular se habla de cualquier equipo y va desde los llamados teléfonos inteligentes (smartphones) pasando por cafeteras, lavadoras, y cualquier cosa que el hombre se pueda imaginar y cuente con los elementos de conectividad.
Pero se debe tomar en cuenta algo, la relación entre los objetos (cosas) y el internet va más allá. Esta pasa por el cumplimiento de una serie de características de importancia como lo son el Monitoreo, control, optimización y automatización.
De acuerdo con la firma de analistas Gartner, para el año 2020 habrá al menos 26 mil millones de dispositivos conectados a internet, lo cual traduce que el IoT será una enorme red de cosas conectadas (entre ellas las personas) estableciendo así una relación de personas-cosas-cosas-personas.
No obstante, existen otras firmas que advierten que podrían ser al menos 50 mil millones de elementos interconectados para la época, lo que supone una serie de desafíos para un sin número de empresas que están optando por estas tecnologías.
¿IoT será solamente beneficios?
Desde el punto de vista optimista, el Internet de las cosas pudiese tratarse de un elemento netamente favorable para la sociedad, sin embargo, debemos tener cuidado con esta afirmación, puesto que a medida que se eleva la interconexión de los elementos, también serán más altos los retos y las amenazas de esta nueva tecnología.
Entre los retos que tendrá la sociedad que afrontar para el correcto funcionamiento de esta tecnología se encuentra el consumo de energía. En la actualidad, las empresas trabajan en la fabricación de artefactos que cuenten con baterías que puedan durar más por ejemplo y permitirles estar conectados de manera inalámbrica por más tiempo.
Por otro lado, la mayor cantidad de elementos interconectados requerirá de una mayor capacidad de ancho de banda, lo que es lo mismo, un óptimo servicio de internet. Un buen proveedor de servicios no sólo garantizará el buen funcionamiento de los equipos, sino su uso eficaz. Anteriormente hablamos de esto en el artículo sobre la disrupción del 5G: https://juanpablorozas.com/la-disrupcion-del-5g-transformacion-digital/
También se requerirá de un mejor trabajo en el diseño de sensores, estos si bien cada día son más pequeños y con mejor capacidad, no se debe dejar de lado el hecho que todavía se tienen muchos bajo procesos de investigación para determinar su capacidad ante la explosión de la conectividad.
La privacidad es otro de los factores que podría afectarse a medida que aumente la conectividad de los equipos. Estos requerirán que se proporcione información que podría ser de carácter confidencial, ello abriría espacios para que dichos datos reciben un mal uso.
Se debe tomar en cuenta que los equipos son fabricados por humanos y a su vez los softwares a utilizar y demás herramientas necesarias. Ello podría generar vulnerabilidades dentro de los sistemas.
¿Qué efectos podría tener en la sociedad?
La regla principal en el futuro es que “todo lo que pueda conectarse se conectará”. Ello sin lugar a dudas va a generar un impacto en la sociedad que todavía no podemos determinar.
La mayor conectividad va a obligar a las personas a desarrollar mayores obligaciones en un corto período de tiempo. Para que se comprenda mejor se cita un ejemplo, una persona tiene agendada una reunión y va camino a ello; el automóvil conectado podría tener acceso al calendario y contaría con la capacidad para elegir la mejor ruta a seguir. Si el tráfico está colapsado podría enviar un mensaje a las personas de la reunión informando sobre su retraso.
Otro ejemplo de esta interconexión ya se está viviendo con los llamados refrigeradores inteligentes. Estos posen la capacidad de observar los víveres que se están agotando dentro de su espacio y gracias a internet es posible que ordene al establecimiento la compra de los mismos.
El mismo Amazon ya ofrece un Microondas Inteligente que ordena Pop Corn cuando este se acaba: https://www.amazon.com/AmazonBasics-Microwave-Small-Works-Alexa/dp/B07894S727
Pero aún así debemos mantenernos expectantes sobre el funcionamiento que tendrá la sociedad a partir del internet de las cosas en el sentido de cómo aprovechará esta ventaja. Volviendo al ejemplo del refrigerador o el microondas, podemos preguntarnos ¿Cómo sabrá el artefacto si el usuario no ha comprado X producto por una enfermedad? O simplemente por no tener dinero.
Es en esto último donde las tecnologías asociadas a la “Inteligencia Artificial” juegan un papel fundamental y que por lo mismo, la gran disrupción está dada por la suma de estas tecnologías: Conectividad (5G) + Internet de las Cosas (IOT) + Inteligencia Artificial (IA) + Big Data Analytics.
Internet de las Cosas para la Transformación Digital
El IoT es un componente importante de la Transformación Digital. De hecho, son muchos los análisis que refieren que el IoT es el componente más importante dentro de la Transformación digital debido a que permite, impulsa y acelera las oportunidades de creación o cambio de negocios y las mejoras en las formas para trabajar o vivir y entretenerse al unir el “mundo físico” con el “mundo virtual”.
En este sentido, el IoT se debe considerar principalmente como una tecnología industrial y de consumo. El Internet de las cosas está asumiendo un papel preponderante dentro del liderazgo en la transformación digital para una amplia variedad de aplicaciones empresariales en industrias de todo el mundo.
Asimismo, reforzar que el impulso de este nuevo nivel de conciencia en el Internet de las cosas es una convergencia de varios cambios de tecnología, lo cual ha acelerado las implementaciones de IoT en diversos campos de la vida diaria.
Como se ha explicado anteriormente, en la actualidad existe una explosión de datos generados por los dispositivos. Dicho de otra manera, la cantidad de dispositivos informáticos conectados en todo el mundo está creciendo, son varios miles de millones de dispositivos conectados y en uso hoy en día, por lo que se esperan muchos más en un futuro cercano.
Estos dispositivos (medidores y aparatos inteligentes, etiquetas de identificación de radiofrecuencia, automóviles conectados, dispositivos portátiles, entre otros) están produciendo enormes cantidades de datos sobre el entorno que los rodea. Es aquí donde el Big Data Analytics juega una rol fundamental.
La nube (Cloud Computing), como motor de crecimiento para los negocios, le está permitiendo a las empresas responder a las cambiantes condiciones del mercado con agilidad y flexibilidad gracias a su uso. Gracias a este servicio, las nuevas soluciones se pueden implementar de forma rápida y rentable con la finalidad de abrir plataformas “online” para permitir a las personas conectarse con dispositivos en todo el mundo.
Cambios laborales a partir de la Transformación Digital
A lo anteriormente expuesto, se debe agregar los elementos que están permitiendo a las personas desarrollar su trabajo de una manera más inteligente, las redes móviles y redes sociales. Estas ofrecen la posibilidad de colocar más información en tiempo real y generan la confianza para la toma de decisiones gracias a los consejos en la palma de su mano. Ello se ha transformado en un “todo integrado” de manera segura en los procesos de negocios y el flujo de trabajo.
El IoT se ira afianzado como el principal observador y monitor dentro de las organizaciones. Dicho valor adquirido se deriva de los datos recopilados, los cuales se emplean constantemente para mejorar la eficacia, la productividad y el cuidado de los consumidores y las propias organizaciones. Aprovechar el IoT para la transformación digital empresarial, debe estar en las primeras etapas sabiendo que queda un largo camino por recorrer para las empresas.
El valor comercial para este avance tecnológico se crea combinando los datos del dispositivo o del IoT que se recopilen, junto con datos ambientales, sociales y empresariales. Como resultado, las soluciones basadas en IoT formarán parte integral del modelo operacional de una empresa y, por lo tanto, deben considerarse como parte integral de una estrategia de transformación digital.